La sucesora de la V-Strom 650 tendrá un motor paralelo de 700 cc y saldrá a competir con ¿la Ténéré 700?

En principio la V-Strom y la Ténere 700 no tienen mucho que ver. Una es una adventure touring enfocada en el uso mixto entre el asfalto y fuera de éste, pero sin tener una puesta a punto super off-road. La otra, por su parte, es una adventure trail ya con una actitud mucho más enduro, rodado 18-21, suspensiones de mucho recorrido y una ciclística pensada para meterse en los terrenos más complicados.

Suzuki no es una marca que se caracterice por presentar modelos completamente nuevos con mucha asiduidad. Normalmente se trata de actualizaciones de productos ya existentes y con cambios no tan radicales, pero motos que sean desarrolladas a partir de una hoja en blanco no es tan normal de ver esta casa japonesa. Quizás lo último en aparecer, y es hasta discutible, haya sido la GSX-R1000 del 2017. Pero eso es algo que está por cambiar, porque en camino hay una nueva plataforma bicilíndrica en paralelo de 700 cc que comenzará con una moto aventurera que será rival de la Ténéré 700.

Del bicilíndrico en paralelo de Suzuki se viene hablando desde hace casi 10 años, cuando en el Salón de Tokio presentaron un concept bike que llevaba un motor de 588 cc con turbocompresor de baja presión con el que desarrrollaba unos 100 caballos de potencia. Unos años después, en 2015, ese proyecto de motor, denominado XE7, volvió a mostrarse en el Salón de Tokio, pero la cilindrada había crecido a 700 cc e incorporaba doble árbol de levas con un diseño más enfocado en la performance.

Desde entonces se han visto una gran cantidad de presentaciones de patentes alrededor de esta motorización, pero nada tan serio como lo que estamos viendo ahora, que además viene acompañado de fotos de mulas siendo probadas en la vía pública, como el prototipo, bastante avanzado por cierto, que fue capturado en el Paso Stelvio en el norte de Italia.

Se trata de una moto que va a enfrentar un mercado más que competitivo. Al igual que la T7, la nueva Suzuki, que estaría usando este motor paralelo de 700 cc -sin turbo, obviamente- estaría llegando al mismo tiempo que la muy rumoreada Honda Transalp 750 que llegaría después de la Hornet.

Ni hablar de las Europeas KTM 890, Husqvarna 901, BMW F750/850, Aprilia 660, Triumph 900, Ducati DesertX y las demás que nos estemos olvidando.

El cambio de un V-Twin a un motor en paralelo implica varias cosas. Debería permitir una moto más liviana y compacta, además de que es más económica de fabricar. Menos tapas de cilindro, menos árboles de levas, distribución más simple, más fácil de instalar y colocar las admisiones y escapes. Seguramente estemos ante un motor con cigüeñal de 270 grados, al menos para seguir emulando un V-twin de a 90 grados.

En esta mula que fue cazada por un medio italiano se pueden ver barrales invertidos de buen recorrido, llantas de rayos 18-21 y un estilo de diseño, si bien bastante camuflado, con una onda retro, recordando un poco al DR Big. Ahora bien, si no hay motor en V ¿Seguirá llamándose V-Strom?

De todas formas, y teniendo en cuenta los tiempos de Suzuki, no esperamos ver esta moto antes de 2024.

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