Monster Dakar Rally Experience: Un viaje para nunca olvidar

Hay años que empiezan bien y otros que arrancan con un viaje al Dakar Rally en Arabia Saudita de la mano de Monster Energy y el Monster Energy Honda Team. La noticia llegó después de la victoria contra Croacia en el pasado mundial de futbol de Qatar. En medio de los festejos por pasar a la final nos informaban que teníamos la posibilidad de ir al Dakar y además llevar a uno de ustedes.

Se armó un sorteo, se eligió al ganador y así arrancamos la primera semana del 2023 yendo de la mano de un miembro de esta espectacular comunidad a uno de los eventos más impactantes del planeta.

El viaje no fue una tarea sencilla, darle media vuelta al globo fue algo extremadamente cansador y se vivió como una aventura separada, saliendo de Argentina rumbo a São Paulo, para seguir a Etiopía y, por último, llegar cerca de 24 horas después a Arabia Saudita. Cansados. Molidos. Y con sólo algunas horas de descanso antes de encarar el próximo día.

A la mañana siguiente nos levantamos con el ruido de la lluvia, en un país que se abrió al turismo hace solo 2 años y con una cultura radicalmente distinta a la nuestra, algo que iríamos descubriendo lentamente. Sin dudas uno de los atractivos más grandes fue conocer este lugar con tanta historia y tan diferente a lo que estamos acostumbrados. La organización no solo tenía un itinerario dakariano, sino que pudimos conocer lo mínimo e indispensable de Arabia Saudita.

Las condiciones climáticas no fueron un tema menor. Con la cantidad de lluvia caída y la cancelación de una etapa hubo que modificar los planes e inclinarnos un poco más al turismo, cosa que si bien somos todos fanáticos de las motos, no nos pareció tan trágico. Conocimos varios puntos históricos de Riad, la capital de Arabia Saudita y comimos en lugares tradicionales muchas de las comidas que identifican a ese país. Sí, incluyendo camello.

Al otro día fuimos por primera vez al bivouac del Dakar para recorrer un poco las instalaciones y conocer a quienes están detrás de escena en una de las carreras más demandantes logísticamente. Una pequeña ciudad de 6000 habitantes que se mueve, que alimenta, que compite y que transmite una carrera sumamente extravagante en todo sentido. Nada está librado al azar: hospital, centro de televisación, baños, duchas, talleres mecánicos propios del Dakar, helicopteros y mucho más forman parte de esta increíble organización que brilla, sobre todo, cuando las cosas no salen como se planearon. La capacidad de respuesta de la ASO -Amaury Sport Organisation- ante eventos inesperados es realmente increíble.

Ese primer día en el bivouac se terminó rápido ya que los pilotos y gran parte de los equipos estaban listos para largar la etapa maratón a unos 400 kilómetros de distancia con lo cual no había mucho más que documentar.

El tercer día de la experiencia Monster Energy Rally Dakar arrancó sumamente temprano, con mucho frío y todavía algo de lluvia en un país que es prácticamente un gran desierto. Teníamos por delante unos 400 kilómetros de viaje hasta llegar al final de la 8° etapa del Dakar, un día antes de la jornada de descanso. Recorrimos una interesante parte de Arabia Saudita con Omar Al Jobara, más conocido como Habibi, nuestro conductor y coordinador durante nuestra estadía en esta Experiencia Dakar.

Una vez llegados a lo que pensábamos sería un lugar árido y hostil, nos encontramos con una recepción de primera clase, en un increíble campamento listo para disfrutar más de 8 horas ininterrumpidas de Dakar. Vimos pasar primero las motos, en una definición de etapa al mejor estilo motocross, con los 6 punteros pasando codo a codo a solo un kilómetro del final.

En ese campamento pasamos todo el día viendo pasar motos, cuatriciclos, SSV, prototipos, buggys, autos y camiones. Quedando pendiente ver el paso de los clásicos que podríamos ver al día siguiente en el bivouac. Al anochecer y luego de más de 8 horas emprendimos la vuelta realizando el mismo enlace que el resto de los vehículos del Dakar llegando al campamento donde pasaríamos la noche al mejor estilo Dakar, durmiendo en carpa pegados a todos los vehículos que participan de esta carrera.

Nuestro último día de experiencia pudimos recorrer un poco del bivouac en el día de descanso donde se aprovecha el tiempo para desarmar a fondo todos las máquinas y dejarlas a punto para la otra mitad de competencia. Luego de eso pudimos hablar con todo el Monster Energy Honda Team: Adrien Van Beveren, Pablo Quintanilla e Ignacio Cornejo, aunque con la ausencia de Ricky Brabec que ya estaba regresando a su país luego de una caída. También pudimos tener contacto con otra leyenda del Dakar y parte del equipo Monster como Joan Barreda.

Lo bueno, si breve, dos veces bueno dicen. Para nosotros fue dos veces breve, porque nos hubieramos quedado a vivir. Todo no se puede. Pero si es importante resaltar la increíble organización de Monster para este evento en el que se encargaron de llevarnos a un país sumamente desafiante y nos dieron una oportunidad tan única que podemos compartir con ustedes.

La amabilidad de un país como Arabia Saudita, que recién está abriendo sus puertas al turismo, fue otro de los puntos fuertes. El interés por intercambiar un poco de nuestras culturas fue impresionante, nos enseñaron mucho y les mostramos una buena parte de lo que es ser Argentino. Nos sentimos siempre muy cuidados, a salvo y en todo momento disfrutamos conocer una cultura muy distinta pero muy interesante.

Las imágenes van a hablar por si solas. Los dejamos con el video de esta Experiencia Monster Dakar. Que lo disfruten.

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