Cada vez más bestia: KTM desembarca con la 1390 Super Duke R Evo festejando 30 años de Duke

Hay algo que es muy importante mencionar, y creo que ya lo hemos hecho en reiteradas ocasiones, y es que los motores no crecen de cilindrada porque se le ocurre a los fabricantes sino porque es la forma que encontraron de mantener -e incluso incrementar- las prestaciones de una moto y al mismo tiempo cumplir con las normas medioambientales que van exigiendo cada vez más. Motores que crecen en cilindrada, catalizadores cada vez más grandes se cruzan en el camino de ingenieros y diseñadores que buscan desarrollar productos cada vez más complejos de mayor performance.

No hay duda que en el olimpo de las hypernaked hay un lugar reservado para la Super Duke R de KTM, una de las motos más radicales que el dinero pueda comprar en este planeta tierra si de motos deportivas hablamos y los de Mattighofen acaban de presentar la última iteración del máximo exponente de una familia que está cumpliendo 30 años de vida con la llegada de la 1390 Super Duke R Evo, un nombre tan complejo como la moto que representa.

Llamativamente KTM no estuvo presente en EICMA con ninguna de sus marcas, apenas hubo un stand de su filial en Italia al que le prestaron la nueva 990 Duke para mostrar en el espacio, sin embargo los buzitos de Pierer Mobility pululaban por todos lados, incluyendo el stand de MV Agusta. La casa naranja prefirió esperar a que bajara un poco la espuma de Milán para lanzar su nuevo buque insignia para su línea de motos naked.

KTM Declara que la nueva 1390 Super Duke R Evo es la encarnación de la fuerza bruta y la evolución, especialmente en este tipo de motos. Desde el diseño visual, la moto se ve más filosa, musculosa y atlética que la 1290 que reemplaza, con el cambio más notorio en la parte frontal, con una nueva óptica. Siempre que suceden estos cambios hay una parte del público a la que no le gusta el cambio y prefiere quedarse con la anterior, y luego con el tiempo se van acostumbrando al nuevo look. Acá el cambio es muy notable y hasta el nuevo conjunto lumínico sigue la premisa de ser parte de una moto naked, ya que deja la entrañas expuestas incluso desde adelante.

Toda la estructura de esta nueva 1390 fue revisada para dar una impresión estética más agresiva, además de las mejoras en performance. Un chasis de perfil más bajo, más compacto, y el uso de materiales livianos le dan a la moto una postura más agresiva, y manteniendo el peso en seco en 200 kilos. El tanque es de 17.5 litros de capacida. Al igual que la versión anterior, la nueva 1390 no hace mucho esfuerzo para esconder su musculatura. El cuadro naranja a la vista, el enorme motor y el subchasis en una sola pieza realmente son puntos importantes de atracción visual, y al mismo tiempo las líneas angulares y los distintos tonos de naranja hacen que no pase desapercibida, incluso desde lejos.

En cuanto a la performance, la nueva 1390 Super Duke R Evo viene con todo, y hasta quizás un poco más. El nuevo motor bicilíndrico LC8 aumentó el diámetro de sus pistones y ahora pasó a tener 1.350 cc -de los 1.301cc anteriores-, que además ahora incorpora distribución variable para ser aún más eficiente de lo que era. El nuevo conjunto mecánico entrega casi 190 caballos de potencia y 145 Nm de torque, en una moto con un embrague anti-rebote asistido de accionamiento hidráulico. Obviamente es Euro 5+.

Desde la ciclística, obviamente, todo lo que se les ocurra. Doble freno a disco flotante delantero de 320 mm con pinzas Brembo Stylema Monobloc radiales y las últimas suspensiones WP semi-activas, que se pueden adaptar a las necesidades del piloto y a la superficie en la que se están usando. Y para mantener esta máquina infernal lo más agarrada al piso posible, la nueva 1390 Super Duke R Evo viene con Michelin Power GP. Solo para darles una idea, la trasera es 200/55ZR17.

Y desde la electrónica, no hay chiche que no tenga. Desde 5 modos de conducción, incluyendo el track mode, con anti-wheelie, anti-stoppie y launch control hasta control de velocidad crucero, telemetría y cronómetro de vuelta a través del gatillo de la luz alta. ABS en curva y control de tracción con control de derrape ya son parte del equipamiento básico de una moto de estas características. Dentro de los opcionales también se puede incorporar control de freno motor y sistemas de suspensión más complejos para usuarios más avanzados.

Pero volvamos a la iluminación. El nuevo faro delantero no solamente es un quiebre en cuanto al diseño y al family feeling de la moto, sino que además ofrece características inteligentes, que prometen mejorar la visibilidad en condiciones de poca luz y ajusta el brillo de acuerdo a las condiciones de la luz ambiente.

Obviamente esta KTM 1390 Super Duke R Evo no es una moto barata, y sale a los mercados más competitivos del mundo con una etiqueta que reza USD 21.500 precio sugerido al público. Habrá que ver cómo se desenvuelven las cosas en los próximos meses en Argentina, pero si llegara hoy en formato CBU y tributando la escala alta de impuestos internos, no sería de extrañar tener que pagar arriba de USD 50.000.

Pero no nos detengamos en esto. KTM está festejando los 30 años del legado Duke y con el lanzamiento de esta nueva bestia, sobre todo con los colores elegidos, le está pagando tributo a las raíces de esta familia naked. Como toda KTM que se precie de tal, esta moto puede ser personalizada con todos los accesorios de la línea PowerParts y PowerWear.

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