Suzuki le sigue apostando a lo retro y viaja a los 70´s con la nueva GSX-8TT

La fiebre por la nostalgia no baja y Suzuki suma otro producto más a su catálogo de motos que recuerdan a otras épocas con esta nueva naked de cilindrada media-alta basada sobre una de sus últimas plataformas.

Después de presentar las nuevas V-Strom 800 y 1050 y anteriormente la Katana ambas recordando a viejos modelos dentro de su catálogo, llega un nuevo modelo, las GSX-8T y GSX-8TT, que intentará meterse a competir dentro del creciente segmento de las naked que le apuntan a esta nueva y popular cilindrada. Motos como la Honda Hornet, Z900RS o XSR900, ¿Ven a qué nos referimos con lo de la fiebre por la nostalgia?.

Ambas deberían estar disponibles en los concesionarios del viejo continente en cuestión de semanas y aprovechan el nuevo el motor bicilíndrico en paralelo de 776cc, un motor con un cigüeñal calado a 270° que también se encuentra en las familias GSX-8S, GSX-8R y V-Strom 800. Este motor sigue entregando alrededor de 83 CV y ​​78 Nm, combinado con una caja de cambios de seis velocidades y un quick-shifter bidireccional. También comparten componentes como el cuadro y el subchasis con la GSX-8S, con la salida del escape aún bajo el piloto.

La variante denominada TT se distingue por un pequeño carenado frontal, inspirado, según se dice, en las robustas motos de carreras de la década del ’70, como la Yoshimura GS1000 que compitió por primera vez a finales de los 70.

Al igual que el resto de la gama Suzuki 800, ambos modelos incorporan control de tracción, modos de potencia, y un tablero TFT a color. Sin embargo, también incorporan un nuevo depósito de combustible de 16,5 litros, asiento y manillar, con retrovisores en los extremos del mismo. Este nuevo depósito está flanqueado por nuevas cubiertas de radiador, negras en la TT y grises en la T.

También cuenta con un faro LED redondo que se comparte en ambos modelos pero en el TT, está detrás de un carenado que cambia radicalmente la estética de la misma. Este modelo también incorpora una discreta quilla bajo el motor y un perfil de asiento más plano, acorde con las motos de competición de la época.

Otro aspecto que distingue a ambas motos es la horquilla invertida KYB, acabada en negro en la TT y dorado en la T. Se diferencian únicamente en el color, ya que ambos juegos de barrales provienen del modelo 8S existente. En el eje trasero, ambas motos utilizan un monoamortiguador KYB, además de discos delanteros de 310mm con pinzas Nissin de montaje radial, también comunes con la 8S.

Ya está confirmada la llegada en España, donde la GSX‑8TT, llegaría con un precio de 11.760.

Sin dudas una excelente adición al segmento de las motos retro, pero sin penalizar prestaciones, ni tecnología ni confort. Una moto moderna para los que saben apreciar una de las mejores épocas del motociclismo.

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