Palermo Bikes Riding Academy: Enduro del bueno de la mano de Husqvarna y Luciano Benavides

A veces me pellizco para ver si las cosas que suceden son verdad. Si bien Motoblog es un trabajo y que este tipo de acontecimientos sucedan es parte del mismo, no deja de ser una excepción. Esto no le pasa a todo el mundo. Así como no salía de mi asombro en nuestro primer Road Trip (ver), tampoco lo sentí como algo normal a este viaje a Salta para participar de una clínica de cross y enduro a cargo de un piloto de la talla de Luciano Benavides y en las propias instalaciones que él y su hermano Kevin tienen para entrenar al más alto nivel con vistas a competir en el mundial de Rally y el Dakar.

Recapitulando un poco cómo es que estaba por tomar un avión rumbo al Aeropuerto Internacional General Martín Miguel de Güemes me acordé de la clasificación en 2019 para el GS Trophy en Villa General Belgrano (ver), cuando no tenía idea lo que me esperaba en el horizonte, y de los días de entrenamiento con el equipo argentino en Tandil y luego en la arena de la costa atlántica practicando con la F750GS. Fue finalmente en el viaje a Nueva Zelanda donde definitivamente me convencí de que al regresar a Argentina tenía que conseguirme una moto de enduro para seguir aprendiendo. Y así fue, con la llegada de mis 40 añitos también vino la KTM 250 EXCF (ver).

Desde el momento en que me subí a esta moto no deja de dar vueltas en mi cabeza la idea de que las marcas deberían prestarle mucha más atención a este tipo de productos y que el mercado es bastante más grande de lo que se cree. La sensación que tuve siempre sobre el segmento de las motos de enduro fue que se trataba de un nicho de juguetes exclusivos disponible solo para unos pocos y caros de mantener. En la práctica me di cuenta de que no es tan así. Tampoco es un hobby barato, pero hay muchas alternativas para entrar de a poco sin la necesidad de desembolsar una fortuna para entrar en este mundo.

El enduro, a mi entender, tiene dos cosas fundamentales que deberían ser los dos pilares sobre los cuales las marcas debieran hacer foco para hacer crecer este mercado: el aprendizaje y el turismo. Arriba de una máquina de 100 kilos se puede aprender de manera mucho más segura y divertida toda la técnica de off-road que luego puede trasladarse a las de mayor cilindrada y peso. Es una auténtica moto escuela. Y por el lado del turismo, con este tipo de motos se pueden recorrer lugares a los que de otra forma no podrías acceder. Sí, es verdad que para recorrer esos lugares hay que cargar la moto en una camioneta o trailer y no podés salir andando de tu casa, al menos para los que vivimos en las ciudades, pero una vez que llegaste a destino contás con la mejor de las herramientas para disfrutarlo como nadie.

En estos últimos años es notable la cantidad de actividades que han surgido por parte de las marcas y los concesionarios con el objetivo de fidelizar a sus clientes, fortalecer el vínculo y, obviamente, aumentar sus ventas. Hay para todos los gustos. Salidas a comer un pancho a la vuelta de la esquina y otros viajes de varios días más sofisticados por alguna región del país. Los clientes se hacen amigos, le meten kilómetros a la moto, se dan cuenta que necesitan algún que otro accesorio, necesitan hacerle el service, o quieren cambiar la moto porque la que tienen no les sirve para lo que necesitan o están para una moto más grande. Incluso en ocasiones es al revés, la moto que tienen es demasiado fierro para su nivel y se dan cuenta que para disfrutar a pleno tienen que pasarse a algo más chico.

La bajada de línea viene desde arriba y están todos en la misma. Las marcas exigen a sus concesionarios que hagan eventos y estos responden con distintas alternativas. No es ningún descubrimiento, basta con darse una vuelta por las redes sociales para encontrarse con todo tipo de propuestas, para todos los gustos y presupuestos. El tema es que, al menos desde las marcas, casi en su totalidad estas salidas están pensadas para motos de calle. Para las motos de enduro es un tanto más difícil encontrarse con la posibilidad de participar de algún evento. Hay que estar un poco más empapado en el tema y conocer algún grupito al cual sumarse.

Para el concesionario oficial Husqvarna Palermo Bikes el escenario es el mismo. Más ahora que la marca está apostando fuerte a los productos de calle con la llegada de sus Vitpilen, Svartpilen y, en un futuro no muy lejano, Norden 901 y algún producto de movilidad. Pero en lugar de sumarse a organizar las tradicionales salidas, decidió apostar por la línea off-road de la marca y aprovechar el enorme valor de tener a un piloto argentino dentro de la escudería Rockstar Energy Husqvarna Factory Racing para armar un combo explosivo. Así nace la Palermo Bikes Riding Academy que combina los dos pilares que mencioné anteriormente: aprendizaje y turismo.

No fue casualidad que el menor de los Benavides estuviera presente en el lanzamiento de la nueva Svartpilen 200. Entre Miguel Guglielmucci, titular del concesionario Husqvarna, y Leandro Panaggio, brand manager de Husqvarna en Argentina, se traían algo entre manos.

Pocos días después del evento recibí el llamado contándome que habían logrado un acuerdo con Faster para hacer una clínica de enduro y motocross en el Benavides Ranch, en Salta, y que me invitaban a participar con mi moto. No pasaron muchos minutos para que confirmara mi asistencia y tuviera los pasajes de avión asegurados.

El resto fue sencillo y solo implicó armar el bolso con todo el equipamiento y cargar la moto para dejar en Palermo Bikes, que se encargó de toda la logística, y subirme a un avión. Bueno, sí, también calmar un poco la ansiedad de no saber bien con qué me iba a encontrar. Es decir, sí, el evento estaba todo organizado en una agenda con horarios y actividades, pero para mí todo seguía siendo una incógnita.

Una vez reunido el grupo completo en el aeropuerto de Salta, unos 14 en total, fuimos recibidos por la organización y por el mismísimo Luciano Benavides, para salir desde allí en caravana hacia Potrero de Uriburu para un pequeño tour de enduro de medio día. Todas las motos cargadas en trailers y camionetas. Si bien la mayoría de los riders eran completos desconocidos para mí, eso era algo que me preocupaba poco y nada. Estando la moto de por medio las amistades se forjan muy rápido, eso estaba garantizado.

Cuando me quise acordar estaba todo empilchado y con la moto en marcha listo para salir. Para lo que no estaba preparado, o al menos no la vi venir, era para el endurito de bienvenida con el que nos esperaban para arrancar el fin de semana. La tarde transcurrió en una subida al cerro con todos los ingredientes. Fueron un puñado de kilómetros que tardamos muchas horas en recorrer y en las que hubo que aplicar todas las técnicas que se les ocurran para hacer que la moto siga trepando en distintas condiciones, con distinto tipo de suelo, entre barro, piedra, raíces, canaletas, etc.

Es difícil de describir con palabras el nivel de exigencia del terreno, y quizás para quienes vivan en zonas con ese tipo de terreno esto sea milanesas con papas fritas, pero para mi fue claramente la prueba más exigente que tuve hasta ahora arriba de una moto. Y a la dificultad del terreno se le sumó que éramos un grupo numeroso para andar escalando por un sendero, con lo que cada vez que alguien se quedaba trabado el resto tenía que parar y en ocasiones las esperas eran en posiciones bastante incómodas, así que no precisamente uno estaba descansando con la moto parada y arrancar desde esas posiciones también era bastante cansador.

La conclusión más inmediata, obviamente, fue que hay que mejorar el estado físico para poder aplicar mejor la técnica y al mismo tiempo mejorar la técnica para cansarse menos y administrar mejor la energía. Sobre todo a la hora de bajar el cerro, cuando la mayoría venía con calambres de todo tipo. Lo bueno de un enduro tan trabado es que en ningún momento se puso peligroso o al menos se percibió como tal, si extenuante, y que todos pudieron subir y bajar, a su ritmo, por sus propios medios.

El viaje al hotel fue a puro calambre para muchos, pero a sabiendas de que nos esperaba una ducha caliente, una buena comida y una impecable cama para recuperar energías para el día siguiente. Y así fue.

El menú del segundo día incluía una visita por el concesionario KTM de los anfitriones, donde está exhibida la moto con la que Luciano ganó el mundial de Rally Junior en 2019 y de allí directo al Benavides Ranch, para encontrarnos con una sorpresa que excedió por mucho lo que a priori pensaba que podía ser, y que al mismo tiempo hizo que muchas cosas empiecen a cerrar y explicar por qué estos chicos ocupan el lugar que ocupan en la élite del motociclismo a nivel mundial.

El lugar es sinceramente impresionante, lo miren por donde lo miren, aunque también forma parte de su intimidad y por eso preferí no filmar ni sacar fotos de las puertas hacia adentro. Literalmente nos abrieron las puertas de su casa para recibir a un grupo de extraños que llegaron con ganas de aprender a mejorar arriba de la moto. Pero básicamente lo que la familia Benavides ha montado en Salta es el sueño de cualquier motociclista al que le guste el enduro y el motocross multiplicado por cien.

El garage está dividido en dos naves, una parte más parecida a un depósito, pero cuyas paredes están totalmente cubiertas de trofeos de lo que estos dos monstruos han ganado desde que son chiquitos, y la otra es un garage propiamente dicho con las motos de los dos pilotos a ambos lados de la nave, con los colores de ambas escuderías -Husqvarna y KTM- y cada moto en su lugar con su correspondiente alfombra. Dos motos oficiales de equipos del Dakar en un mismo lugar, aunque no sea la misma con la que van a correr en la próxima edición, algo que no se ve todos los días.

Y atrás de esto una especie de living-vestidor con todas las botas, jerseys, cascos y antiparras que se les puedan ocurrir. Todo impecablemente presentado, con una atención al detalle pocas veces vista. Es como tener tu propio local de indumentaria y accesorios. Todo puesto a un nivel que no había imaginado ni soñando. Lo más difícil de todo fue mantener la calma y evitar ponerme en modo cholulo. Pero por suerte llegaron las actividades y hubo que enfocarse en escuchar al maestro y subirse a la moto.

La segunda jornada transcurrió completamente en la pista de motocross que se encuentra dentro del mismo predio, un circuito diseñado por Lucas de la Fuente, responsable también de diseñar y construir la pista del MXGP en Villa la Angostura, y el circuito que utilizan Luciano y Kevin para entrenar motocross. Allí Faster se subió a su Husqvarna FC 450 bajo la sombra de un árbol y con mucha paciencia y claridad explicó muchos conceptos básicos sobre la postura y los movimientos sobre la moto. Posición de las manos, los brazos, las rodillas, el culo, los pies, los tobillos, etc. Y luego demostró la teoría con unas vueltas a la pista que dejaron a todos hipnotizados.

El resto de la jornada transcurrió con prácticas de todo tipo y pequeños ajustes para ir mejorando arriba de la moto. Acelerá de manera constante y progresiva, andá peinando el freno delantero en la curva así la moto dobla bien agarrada, poné los pies de esta forma, apretá las rodillas de esta otra, no vayas tan echado para atrás, levantá la pierna hacia adelante y pegada a la moto, movete que sino caes como una bolsa de papas, etc. Si bien hay un abismo entre un piloto como Luciano Benavides y un grupo de aficionados como los que estábamos de alumnos ese día, incluso los más experimentados en motocross, la mejora conforme avanzaba el día fue evidente. O al menos la soltura.

Esa jornada de sábado concluyó con una escapada rápida al hotel para bañarnos y cambiarnos y un espectacular asado en una especie de club house que han construido dentro del Benavides Ranch y que dejó obnubilados a todos. Un lugar preparado para recibir gente y para entrenar a dos atletas de categoría mundial. Nada está librado al azar allí. Un gimnasio más completo que el que puede tener cualquier cadena de fitness u hotel, sala de masajes, una bañadera alta para llenar con hielo para la recuperación muscular, una pileta para nadar contra la corriente y una máquina para simular la falta de oxígeno por altitud.

Si me pusiera a detallar todo, deberíamos pedirle un espacio a Revista Living. Lo cierto es que los hermanos Benavides pudieron tener estas instalaciones listas justo antes del comienzo de la pandemia del Covid-19 y se pasaron toda la cuarentena entrenando allí dentro.

El domingo fue el último día para esta primera edición de la Palermo Bikes Riding Academy con la línea off-road de Husqvarna y fue una jornada gloriosa. Arrancamos bien temprano para aprovechar el día y nos dirigimos a un terreno cercano donde hay otros circuitos, uno específico de curvas, otro de motocross un poco más sencillo, un pequeño superenduro con obstáculos y varios circuitos single track para trepar el cerro.

Allí pasamos la mañana practicando distintos ejercicios en el circuito de curvas, intentando procesar toda la información y asimilar todas las instrucciones que el instructor Luciano Faster Benavides nos fue dando durante estos tres días. Obviamente cuesta aplicar todos esos cambios de una, pero creo que lo más importante es recordar todos los consejos e intentar aplicarlos de a poco cada vez que nos subimos a la moto. Tomarnos el tiempo para hacerlo a conciencia e intentar llevarlos a la práctica en cada oportunidad.

Para coronar un fin de semana glorioso, salieron unas vueltas al cerro en dos circuitos con bastante más ritmo que el primer día, aunque con dos trepadas bien peludas en las que hubo que bajarse de la moto y ayudar desde abajo ya que estaba bastante húmedo, roto y lleno de raíces. Pero fue una tarde espectacular para cerrar un fin de semana perfecto a pura moto en un lugar que con el paso del tiempo se va a convertir en una especie de La Meca del enduro en Argentina.

Todavía es muy nuevo y estos chicos, Kevin y Luciano, son muy jóvenes a pesar de todos sus logros, pero cuando pase el tiempo y sus agendas ya no estén tan comprometidas por las competencias internacionales, creo que van a poder volcar toda la experiencia adquirida al máximo nivel en un lugar al que va a querer ir todo el mundo, desde todos los rincones del planeta. Nosotros tuvimos el privilegio de ser los primeros.

Es difícil transmitir en una breve nota todo lo vivido en estos tres días en Salta, así que espero que el video les pueda mostrar al menos una fracción de la experiencia. Igualmente tengo algunas conclusiones de todo lo vivido que vale la pena mencionar.

Los Benavides son un equipo completo. No cabe ninguna duda que Luciano y Kevin son dos pilotos fuera de serie y por algo están donde están, pero para que todo esto suceda hay una familia entera detrás de ellos totalmente alineada con el objetivo de llegar a lo más alto. Al frente de toda esta organización, de todos los detalles, de todo el mantenimiento de una estructura profesional enorme están Isis y Norberto, sus padres, trabajando para que todo ocurra. Desde el momento en que llegamos hasta que nos fuimos el motociclismo se respira en el aire como en pocos lugares he visto. Incluso Agostina, la hermana, y Norberto se sumaron a la endureada del domingo a la tarde.

Seguramente no sea el único lugar del país, pero Salta es una especie de Disney para los amantes del enduro. La diversidad de paisajes, climas y tipos de terreno disponibles lo hacen un lugar ideal para la práctica de este deporte, y si a eso lo acompañas con paisajes increíbles y una infraestructura gastronómica y hotelera de primer nivel, no puede fallar. Y en cuanto a dificultad, hay para todos los gustos.

En tiempos donde la oferta de salidas por parte de las distintas marcas de motos presenta cada vez más opciones, me parece un gran acierto por parte de Palermo Bikes y Husqvarna el hecho de enfocarse en organizar eventos específicos para las motos de off-road que, de nuevo, conforman un segmento al que históricamente se le ha prestado poca atención y que tiene un potencial de crecimiento enorme. Que sea el primero de muchos y que cada vez más gente se sume a la actividad.

Es cierto que es un poco más complejo, que no todo el mundo tiene la posibilidad de tener más de una moto y que con estos aparatos no se puede ir de lunes a viernes a trabajar. Pero para el que sí tiene los medios para subirse a un fierro de estos el consejo es que no deje pasar la oportunidad de hacerlo. Va a descubrir un universo totalmente nuevo que combina un montón de factores que después le van a servir para aplicar en otras motos. El enduro es deporte, es entrenamiento, es diversión, es escuela y es la posibilidad de recorrer lugares a los que no podrías llegar con ninguna otra moto. Si pueden, háganlo. No se van a arrepentir.

Por todo lo demás, el agradecimiento a Miguel y Fernando Guglielmucci por la invitación, junto con Husqvarna Argentina, a Luciano Benavides y su familia por la dedicación completa para recibirnos durante esos días y al excelente grupo con el que tuve el privilegio de compartir el viaje por la buena onda y la camaradería.

Como dijo alguien durante el viaje: te subis a andar en moto con gente, te bajas de la moto con amigos.

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20 respuestas

      1. Ojala fuese envidia, pero no. Simplemente que en el contexto actual no costaba nada sumar unos pequeños cuidados para evitar unos numeros mas en el contador de casos diarios. Lo copado del plan y la invitacion gratis en nada impide tomar recaudos ni tampoco en hacer la actividad respetando la ley de transito.

        1. Las medidas de precaución deberian ser un ejemplo en todos los aspectos. Tanto de pandemia como de seguridad respetando las leyes, no se pueden llevar motos en la caja de la camioneta con la tapa abierta, es un acto irresponsable para el resto.

          1. perdon, discrepo de la parte “acto irresponsable”, llevar la moto asi no significa irresponsabilidad porque puede estar mejor atada y sostenida que en el mejor de los trailers “legales de ahora”.
            Las tapas de las chatas pueden soportar muchos kilos sobre la misma.
            Es simplemente una falta de transito, que se aplica en Argentina, en muchos paises es totalmente legal transportar asi las motos, y no creo que sean leyes irresponsables.
            Me gustaria saber que cantidad de accidentes se ocacionaron por llevar una moto asi para poder “es irresponsable” porque afecto a otro.
            Te comento, he tenido un accidente en una chata que llevaba una moto atras, la chata termino en un arbol pasando el terraplen, no se desprendio la moto ni nada de lo que llevaba atado.
            Lo que deberian reglamentar es la calidad de los tracka tracka. si son buenos olvida de un accidente.
            Pero “la ley Argentina” no lo permite, anda a saber basados en que analisis. Me gustaria conocerlo. (al analisis o al inutil que lo reglamento)

          2. GuilleV6, coincido que si están bien sujetas es seguro, pero me gustaría que lo reglamenten entonces y nos atengamos a esa reglamentación y no al criterio del que ata la moto. ¿cachai?

    1. Buen día Eze.
      La nueva patente para los trailers acaba de implementarse y la 101 se puede utilizar hasta noviembre 2021.

      https://motoblog.com/trailers-mientras-ansv-trabaja-en-la-nueva-normativa-dnrpa-prorroga-12-meses-el-patentamiento/

      Respecto de los barbijos invisibles, fuimos un grupo de 14 personas (incluyendo a Luciano y un amigo), todos fueron con su hisopado negativo antes de hacer el viaje para poder disfrutar del evento con total libertad.

      Y el mismo procedimiento fue realizado al regresar a Buenos Aires.

      1. Matías, esa no es una patente porque no es oficial. Un hisopado sólo negativo no te garantiza nada en tanto existe un periodo ventana en el que podes estar contagiado y el virus aún no ser detectable con lo cual un solo negativo no es garantía de nada ni razón suficiente para no usar barbijo. Repetirlo en Buenos Aires al volver no impide que hayas contagiado antes, incluso tampoco que no estés contagiado.

  1. Es así, el enduro permite llegar donde no llegas casi con nada, capaz con un cuadri.
    Los mas terrenales tenemos una Dual Sport y en las sierras como en mi caso te cansas de ver paraisos como estos de Salta, larga vida a las enduro/dual sport.

  2. No entiendo cual fue el fin de esto? Fidelización de clientes? 13 clientes? Prensa publicidad? Un poco de todo? Si así fue, buenísimo para los afortunados en ir hasta Salta a hacer en enduro de verdad.
    Por cierto “Benavides Ranch”…. Jatejodé.
    Pensé que nada superaba a los nombres que usan los bodegueros Mendocinos.

          1. Vi todo el video, excelente la experiencia, vale la pena tomarse estos 3 días para aprender y tienen mucha camaradería. Los paisajes el paseo, las trepadas, el habitat de esa KTM esta ahí. El Enduro/Dual Sport es un viaje de Ida, como dijiste en la otra nota, dame monocilindricos hasta para ir a comprar el pan.

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