Test Ride: Honda CBX 1000 (1979)

Hace instantes Max me mandó un avance de la intro de un video en el que estuvo trabajando una buena cantidad de horas. Es impresionante el tiempo que puede pasar sin que nos demos cuenta mientras escribimos y editamos los contenidos de Motoblog, es equivalente a lo que pasa cuando uno se engancha con un libro, o se pierde mirando series o inmerso en los videojuegos. Volviendo a lo que me mandó Max sobre el BMW 430i que estuvimos probando hace unos días, las imágenes están buenísimas y la voz en off, que al principio me pareció un montón, hace referencia a las cosas que nos han pasado en estos últimos tiempos y que a veces no nos detenemos a disfrutarlas.

Bueno, la llegada de una nueva edición del DGR siempre es tiempo de pensar en qué motos vamos a asistir. Porque obviamente que el evento y la causa están por encima de todo, pero no por eso vamos a dejar de cumplir con la consigna y, mucho menos, de entusiasmarnos por subirnos a una pieza de historia del motociclismo mundial. El año pasado ya nos pellizcamos al momento de subirnos a las Z1 y Z2 de Kawasaki, y en este año creo que nuestras caras de asombro fueron aún mayores. Sí, subirse a una Honda CBX de 1979, en un estado de preservación casi absoluto, con un motor de seis cilindros que arranca, regula, funciona y suena como si se tratara de una moto fabricada hoy mismo realmente es algo excepcional.

Entonces este pequeño video que me mandó Max hizo que ponga un poco en perspectiva las cosas y que por unos segundos entienda que son cosas que no le pasan a todo el mundo, y que de alguna forma nos hacen mirar un poco para atrás y entender que algún mérito tiene que haber para que un coleccionista nos de las llaves de algunos de sus chiches más preciados y nos permita irnos por unos días a disfrutarlos por la vida.

Es difícil correrse de la posición de admirador de una moto como esta, que después de 45 años sigue en su esplendor y continúa asombrando a la mayoría por sus cualidades, dignas de un modelo que marcó una era. No se si hay tantas motos de las que sepamos la historia o, si no la sabemos, haya suficiente literatura al respecto para ilustrarnos un poco. Una máquina que fue desarrollada en una época en la que las marcas se habían embarcado en una especie de carrera armamentista para ver quién ocupaba el lugar del póster en las habitaciones de los jóvenes de entonces. Y por aquel entonces, la CBX era la supersport por excelencia.

No voy a repetir lo que dije en el video, pero creo que es importante resaltar un poco la génesis de este modelo. Honda le debe la creación de esta moto a Shoichiro Irimajiri, un ingeniero aeronáutico que trabajó en la división de carreras de la casa japonesa, y que fue el responsable de incorporar los motores de seis cilindros en la competición y en esta moto de calle. Irimajiri en su carrera llegó a desarrollar motores de Formula 1 para Honda y terminó siendo uno de los artífices de la resurrección de SEGA en los 90, pero sin dudas será recordado por su obra cumbre: la Honda CBX 1000.

Irimajiri dijo en su momento que en Honda tenían una moto de cuatro cilindros que era superior a la CBX 1000, más potente, más ligera, de mejores prestaciones, pero que había algo respecto del motor de seis cilindros que no se podía representar con números, pero que generaba un magnetismo que no se podía comparar con nada.

Y aquí estamos, 45 años después arriba de una máquina que en su momento parecía un producto salido de un laboratorio de la NASA, y que solo deja en evidencia las limitaciones de aquellos tiempos a través de algunos componentes como las suspensiones y los frenos. Los primeros porque parecen de bicicleta y los últimos porque muestran a las claras que la tecnología de frenar no había avanzado al mismo ritmo que la de acelerar.

Pero eso era una supersport del momento, con una moto así se corría también, y es por eso que a semejante motor, que está colgado del cuadro, se le acortó el cigüeñal y se desplazaron componentes como el estator, el embrague y la caja para que no fuera tan ancho y permitiera inclinar la moto sin que el motor sea una limitante. También se colocaron los 6 carburadores Keihin de 28 mm con cierto ángulo para que no afectara la posición de las rodillas del piloto y la moto pudiera ser lo más compacta posible.

Así y todo estamos hablando de un motor con doble árbol de levas, con refrigeración por aire y un radiador de aceite, con 24 válvulas y la tapa de cilindros realizada en magnesio para reducir peso y con encendido electrónico. Una moto más que avanzada, con una mecánica que entrega 105 caballos de potencia a 9.000 rpm y 72 Nm de torque a 6.500 rpm. Honda declaraba en su momento una velocidad máxima de casi 220 km/h.

Números que hoy pueden parecer normal, y que los entregan motos de menos cilindrada y con un tercio de la cantidad de cilindros que ésta, pero que para la época metian miedo. La CBX 1000 tiene un tanque de combustible con 20 litros de capacidad, con un cierre bastante particular, y en orden de marcha acusa en la balanza 272 kilos. Pese a esto, es bastante fácil subirla en el caballete central y sorprende que se pueda manejar como si fuera una moto moderna.

Como dije al principio, es impresionante cómo se pasa el tiempo mientras estamos inmersos en este mundo editando y escribiendo. Por eso es importante, cuando pasan estas cosas, detenernos por un momento y entender lo que significa. ¿Qué le vamos a criticar a un objeto de colección de este calibre? Nada. Y en todo caso ya lo hicimos con las suspensiones y los frenos. Vale aclarar que los amortiguadores traseros Öhlins no son originales de la moto. Pero una máquina-joya-obra de estas características en este estado sólo queda disfrutarla y admirarla.

Así que por ahora solo queda agradecerle a Andrés de Classic Motorcycles [email protected] por prestarnos sus motos por segundo año consecutivo. Siempre es un privilegio poder manejar esta clase de motos, pero al mismo tiempo es una responsabilidad enorme y la presión solo se va cuando logramos devolverlas tal cual nos la dieron.

Así que este es el test ride de la Honda CBX 1000 de 1979, y ojalá que de alguna forma podamos transmitirles las sensaciones que

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FICHA TÉCNICA

Modelo: Honda CBX 1000
Precio:  USD 7.000 en 1979

MOTOR
Tipo:  6 cilindros, 4 tiempos, DOHC, 24 válvulas, 6 Carburadores Keihin 28 mm, refrigerado por aire-aceite.
Cilindrada: 1047 cc
Potencia:  105 hp a 9.000 rpm (esta versión USA limitada a 100 caballos)
Torque: 72 Nm a 6.500 rpm

TRANSMISIÓN
Tipo: 5 velocidades
Transmisión final: por cadena

CHASIS
Suspensión delantera: Horquilla telescópica convencional con 160 mm de recorrido
Suspensión trasera: Doble amortiguador ajustable con 100 mm de recorrido
Frenos delanteros: Doble disco de freno de 276 mm con calipers de 1 pistón.
Frenos traseros: Disco de freno de 296 mm con caliper de dos pistones
ABS: No
Control de tracción: No
Neumáticos: 3.50 x 19 adelante y 4.25 x 18 atrás.

PRESTACIONES
Velocidad máxima: 220 km/h
Aceleración 0-100: 4 segundos

DIMENSIONES
Largo x Ancho x Altura: 2220 mm x 780 mm x 1145 mm
Distancia entre ejes: 1.495 mm
Altura de asiento: 810 mm
Peso en orden de marcha: 272 kg
Tanque de combustible: 20 litros

23 Responses

    1. Quien tuvo motos de los 70´s sabe que esas defensas son la vida de las motos 4 en linea, fácilmente se te podía caer en parado y partir la tapa del alternador dañando la bobina… ahi arrancaba el periplo de reparar la tapa y rebobinar, luego rezar que quede bien o que nunca mas quede como tenia que ir, problemas eléctricos, problemas de carga y mas. yo se lo dejaría y nada de living, la usaría. saludos.

    1. honda siempre la presento como honda CBX a secas, cilindada. y si se la queremos agregar seria 1047. La Benelli sei 750/900 se creo en la época que Benelli pertenecía al argentino Alejandro Detomaso y fue diseñada por el mismo, no era mas que una honda cb 500 con un cilindro mas de cada lado, una moto con muchos problemas de puesta a punto y eléctricos, fue poco popular. La kawasaki z o kz 1300,una gran moto en todos los sentidos, no estaba tan orientada a lo deportivo por sus características generales como el peso, cardan,posición,etc.

      1. No es tan difísil, pero se necesitan 6 vacuómetros que pocos mecánicos tenían ( tampoco muchos tenían los 4 ) controlando el buen armado de los burcas y con eso es cuestión de minutos.
        Ahora a ojo, con el tanque puesto y sin los vacuómetros es imposible.

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