Motorcycle Art: Super Veloce 1000 Serie Oro

En la historia hay motos que son un tanto difíciles de explicar, de entender el razonamiento que lleva a un fabricante a desarrollarlas y, más aún, a una persona a comprarlas. No porque estén mal, todo lo contrario, sino por el hecho de que, como en este caso, se trata de objetos que están más hechos para mirarlos que para usarlos, por más que la performance no pueda ser objetada desde ningún ángulo.

Como en todos los mundos, el lujo tiene su lugar en el de las motos, y en ese terreno nadie mejor que MVAgusta para materializar el refinamiento en una obra de arte, en un objeto de deseo. Hace pocos días publicamos una nota con las fotos y el video de nuestra visita a la planta de la marca italiana en Schiranna sobre el final del año pasado, y entre los comentarios encontramos uno muy acertado: no fueron a una fábrica, eso es un atelier.

Por aquellos días de EICMA en noviembre de 2023, los ojos del mundo estaban posados sobre la llegada de la LXP Orioli, pero dando la vuelta a una especie de museo que los de Varese habían armado, se encontraba otra de las novedades de la marca, aunque sus detalles no eran tan fáciles de visualizar entre tanta gente, luces y la plataforma giratoria en la que se encontraba esta joya que anticipaba la llegada de una edición limitada de la que solo habrá 500 unidades.

Porque en una moto como ésta no se trata solo de los componentes, donde encontraremos lo mejor de lo mejor en cada rubro, sea la electrónica, las suspensiones, los frenos, las llantas o los neumáticos, sino que cada detalle, cada material, cada rincón de la moto es una expresión del más sofisticado diseño. Y no solo eso, también es el más logrado tributo a otra leyenda de MV Agusta como fue la F4 750 Serie Oro.

Es difícil abstraerse de lo visual, pero la Super Veloce 1000 Serie Oro aspira a ofrecer lo máximo en cada detalle, y la mecánica no es la excepción. El motor tetracilíndrico de 998 cc. entrega 208 caballos de potencia a 13.000 rpm y 116 Nm de torque a 11.000 rpm, gracias a sus válvulas y bielas de titanio, a los 8 inyectores, y al sistema de escape desarrollado exclusivamente por Akrapovič para esta moto.

La electrónica no solo involucra los modos de conducción, que son cuatro en esta moto, sino también la posibilidad de regular el control de tracción, el anti wheelie, anti stoppie, launch control, control de torque, respuesta del acelerador, control de freno motor, control de velocidad crucero y Quickshifter 4.0, sino que también incorpora un modulo GPS que se integra con la app MV Ride, que además permite compartir las rutas que hacemos, y un paquete de suspensiones de Öhlins que se regula electrónicamente, incluyendo el amortiguador de dirección. Solo la precarga, adelante y atrás, se ajusta manualmente.

Y por último los frenos y los neumáticos, ofreciendo mejor de lo mejor por parte de Brembo y Pirelli. Dos discos delanteros de 320 mm con pinzas Stylema de 30 mm operadas por una pinza radial de la misma marca. Atrás, más normalito, un disco de 220 mm y una pinza de dos pistones. Por el lado de los neumáticos, Pirelli hizo una versión dedicada de las Diablo Supercorsa SP4.

El resto es mejor mirarlo que explicarlo, así que los dejamos con las fotos y el video de esta moto que, mejor que ninguna otra, hace honor al slogan de MV Agusta. Motorcycle Art.

Y si alguno de ustedes anda con ganas de tener una de estas en su living, sepan que en Europa cuesta unos €70.000. Como para que vayan sacando cuentas. No se aceptan pesos ni chachos.

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