Picante y salado: Can-Am lanzó el Maverick R X-RS con 240 caballos y todos los chiches

Acá no somos ningunos expertos en SxS –o side-by-side- como se les llama a estos vehículos más precisamente, a pesar de que en Argentina para todo el mundo caigan en la categoría UTV, que en realidad es el nombre que reciben los que son para trabajar, los que tienen caja. Estos más recreativos se denominan side-by-side, SSV o SxS, como más les guste a ustedes.

Bueno, si bien oficialmente en Motoblog hemos probado solo dos modelos de este tipo de juguetes, el Maverick X3 de Can-Am en las Dunas de Ritoque, Chile, hace unos cuantos años, y el Teryx KRX 1000 de Kawasaki, en los médanos de la Costa Atlántica hace no mucho tiempo, la realidad es que hemos manejado algunos más. En este mundo fierrero siempre hay un amigo que tiene algún chiche de estos para prestar. Lindos juguetes, un tanto peligrosos para los más inexpertos pero con capacidades que a veces no entran en la cabeza cuando uno las sabe aprovechar.

Dentro de este universo de los SxS, Can-Am acaba de presentar en nuestro país el más furioso, equipado y caro juguete para grandes que se haya visto en nuestro país. Sí, Grupo Simpa, representante de Can-Am en nuestro país desde hace más de una década, lanzó en el día de ayer al mercado el nuevo Maverick R, en su versión X-RS, que tiene dos números que sobresalen por encima del resto. Uno es la potencia, estamos hablando de un motor Rotax T de 999 cc., tricilíndrico y turboalimentado, que entrega 240 caballos de potencia. La otra cifra tiene que ver con su precio, porque para subirse este verano a uno de estos juguetitos, hay que desembolsar la módica suma de USD 108.000. No es un chiste, no tiene remate.

Ahora bien, hicimos una regla de 3 simple con el BMW 430i que estuvimos probando la semana pasada y, teniendo en cuenta las condiciones de importación de cada uno de estos, los valores están en línea. Son un disparate, pero están en línea.

Pero dejemos de llorar por un chiche que muchos no podríamos comprar ni aunque costara un tercio de su valor, y dediquémonos a admirar la ingeniería que hay detrás de tamaña máquina. Un corazón de 240 caballos, Rotax 999T de 999 cc de 3 cilindros turboalimentado, enfriado por líquido, con intercooler integrado y con filtro de aire de alto flujo, obviamente alimentado por inyección electrónica de combustible pero, además, con un control inteligente de aceleración. Todo esto asociado a una caja de doble embrague Rotax DTC, de 7 marchas, con alta y baja, y levas al volante.

Diferencial delantero bloqueable con tecnología exclusiva Smart-Lok, sistema de tracción de 4 modos: 2WD / 4WD con diferencial delantero bloqueable / 4WD TRAIL ACTIV / 4WD TRAIL. Y como si esto fuera poco, incorpora un sistema DPSTM de dirección asistida de tres modos de segunda generación. Customizable hasta el más mínimo detalle.

Lo interesante, según nuestro leal saber y entender, es que todos estos datos sirven para que todo el mundo diga ¡Wow!, pero en realidad quedan un tanto en segundo plano cuando nos ponemos a analizar lo que realmente importa en este tipo de vehículos que son el chasis y las suspensiones. Y acá es donde está puesta la papota.

El nuevo chasis-jaula en forma de V de altísima resistencia aumenta la rigidez torsional y optimiza el comportamiento del vehículo en cualquier tipo de terreno. La suspensión delantera es mediante brazos oscilantes de 4 eslabones con muñón de alta resistancia de alumnio forjado y ofrece 660 mm de recorrido, acompañado por amortiguadores Fox 2.5 Podium con piggyback y tecnología Smart-Shox con válvula Live Gen 3 con regulación de compresión de dos velocidades y rebote. La suspensión trasera tiene prácticamente la misma configuración y recorrido, 660 mm, pero equipa amortiguadores Fox 3.0 Podium. El despeje al suelo es de 430 mm.

Por el lado de los neumáticos, el Maverick R viene con Maxxis Bighorn 2.0 con llantas de 16″ con beadlock, y para frenar a esta máquina de más de 1000 kilos cuenta con frenos de disco en las cuatro ruedas, cuenta con discos de 265 mm con pinzas hidráulicas de tres pistones adelante y dos atrás. En cuanto a la ergonomía, las butacas vienen con el sistema Ergo Lock, con ajuste en cuatro direcciones para lograr la posición de manejo, y de acompañante, ideal. El resto es cotillón.

Sí también viene con una pantalla de 10,8 pulgadas touch con conectividad mediante Bluetooth y USB para usar con el smartphone mediante la App BRP GO! que ofrece funicones de navegación y también del teléfono en la pantalla. En la rejilla trasera puede cargar hasta 90 kilos y cuenta con un tanque de combustible de 50 litros que, asumimos, debe durar bastante poco teniendo en cuenta como se manejan estas cosas.

Ya está disponible en Argentina, a través de la red oficial de concesionarios, en dos colores: Carbon Black & Neo Yellow y Triple Black.

***

***