Tesla no fue la primera marca de autos eléctricos, pero sin dudas ha sido la que revolucionó el mundo de los autos con su modelo de negocio y el desarrollo de sus productos. La marca fundada por Elon Musk dejó bien en claro que los autos eléctricos no tienen que ser necesariamente algo aburrido y se enfocó en hacer que sus Model S, X, 3 e Y sean mejores que los vehículos con motor de combustión interna contra los que competían.
Tesla supo desde el comienzo que para lograr un producto atractivo, que quisiera ser comprado por todos, incluso por quienes no tenían pensado adquirir un auto eléctrico, iba a tener que desarrollar una infraestructura acorde a sus necesidades. Esto incluye una fábrica destinada a fabricar las baterías con la tecnología y la calidad necesarias para permitir que los autos tengan la autonomía y performance que ofrecen y una red de supercargadores a lo largo y ancho de los mercados en los que tuviera presencia, siendo Estados Unidos, claro, el primero en llevar a cabo este experimento.
Para ello llevó a cabo algunas acciones financieras que le permitieron hacerse de los fondos para lograr avanzar con el modelo de negocio. Quizás la más recordada fue con el Modelo 3, que sin tener listo el modelo de producción logró 200.000 reservas de USD 1.000 en el primer día, luego de su presentación. Son 200 millones de dólares que Tesla embolsó en una jornada para ponerse a producir. Y la gente tuvo que esperar, algunos bastante más de la cuenta, para que le entregaran un auto que solamente habían visto en un video.
Hoy en India está el caso de Ola, una marca de scooters eléctricos que hasta hace un año no existía, pero que en su ADN vemos ciertas similitudes con lo que hizo la empresa de Elon Musk en el mundo de los autos. Parte de ANI Technologies, Ola estará invirtiendo 327 millones de dólares en construir su planta para la fabricación de scooters eléctricos que tendrá una superficie de 250 hectáreas, siendo la más grande del mundo y con una capacidad de producción de 10 millones de unidades por año.
Notablemente, Ola Electric fue fundada en 2017 e ingresó en el club de los unicornios en 2019, convirtiéndose en la más rápida de India en lograrlo. Hasta la fecha ha logrado fondeos por 307 millones de dólares con inversores como Tiger Global Management, SoftBank, Tata Sons, Matrix Partners, Hyundai Motor y su subsidiaria Kia Motors. Para los que no están al tanto, se denomina unicornio a las empresas privadas que logran una valuación de 1.000 millones de dólares.
El último acuerdo de Ola Electric fue la colocación de deuda por USD 100 millones con el Banco de Broda por un término de 10 años, como fondeo y para terminar la primera etapa de la Futurefactory de Ola.
Finalmente, en los últimos días, Ola Electric presentó su primer scooter eléctrico en dos presentaciones: S1 y S1 Pro, que ya está comenzando a producirse en su fábrica y que, al igual que en Tesla, se puede configurar y reservar online en la web de Ola Electric.
¿Qué tiene de diferente el Ola S1? Si se lo mira en detalle, mucho. El primer producto de Ola Electric busca superar a sus competidores en todos los aspectos. Empezando por las prestaciones, viene con un motor desarrollado in-house que produce 8.5 kW de potencia máxima y 58 Nm de torque máximo. Sumado al pack de baterías y a un controlador digital, también de desarrollo propio, que le permiten lograr una autonomía máxima de 181 kilómetros con una carga completa y una velocidad máxima de 115 km/h.
Además, en 18 minutos se logra una carga rápida que da una autonomía de 75 kilómetros a través de la red de Hyperchargers que Ola Electric estará instalando en India con más de 100 mil puntos de carga.
La forma en la que están construidos motor y baterías libera el espacio bajo el asiento. Ola declara que entran dos cascos abiertos o las compras de supermercado para una semana. Son 36 litros de capacidad de carga total. El S1 estará disponible en 10 colores diferentes, para todos los gustos. La iluminación, obviamente es full LED y llama mucho la atención el diseño de la luz delantera, inspirada en el robot de alguna película, logrando un look muy simpático. Frenos a disco y buenas suspensiones para bancarse todos los caminos.
Desde la tecnología, el S1 tampoco se queda atrás. El scooter no utiliza llave y funciona directamente enlazado con el smartphone del usuario, detectando la proximidad del mismo para bloquearlo o desbloquearlo. Una pantalla TFT touch de 7” hace las veces de instrumental, pero además cuenta con una enorme cantidad de aplicaciones, widgets y moods para que cada uno pueda configurar el scooter a su gusto. Cuenta con un procesador de 8 núcleos de 1.8 Ghz, 3GB de RAM, conexión Bluetooth, LTE y GPS integrado.
Entre otros, el Ola S1 cuenta con control de velocidad crucero, control por voz de las funciones del instrumental, marcha atrás y asistente de arranque en pendiente.
Ola Electric tiene un objetivo muy serio respecto de su participación de mercado en el mundo de las dos ruedas eléctricas y en sus planes está la expansión a todos los rincones del planeta. Será cuestión de ver quién toma las riendas de una marca como esta en Argentina, donde ya están Nuuv y Super Soco como las más destacadas.
***
***
5 Responses
Se la ve linda, ahora lo que no dice nada es de CBS o ABS… mucho render y pantallita linda, pero debe ser segura siempre.
Tiene CBS segun lei por ahi
Que futuro tan raro, sin motores a explosión, no contaminaremos pero el embole te lo debo. Me voy a repasar la nota del KLR650, ¡Eso sí que es vida!, como dijo el de Brieva en el monólogo “Diario de un rosarino en Canadá”.
Yo me pregunto, se esta trabajando al mismo ritmo con el que se trabaja para mejorar los vehículos eléctricos en como vamos a generar la electricidad para todos esos vehículos, que serán la mayoría, en un futuro? que se hace con las baterías? todas son 100% reciclables?
Porque si no vamos a dejar de contaminar de una manera para contaminar de otra.
Sumale que lo que carga las pilas no deja de ser a base de quemar combustible fosil.