Diversión y seguridad: Los track days del Gálvez son para que vayamos todos

Hay cosas que en el interior del país son mucho más fáciles que en la ciudad de Buenos Aires, cuando se trata de encontrar lugares donde disfrutar de la moto a otro nivel. A veces son rutas en las que con solo transitarlas uno puede disfrutar de una buena cantidad de curvas, que por estos pagos son difíciles de encontrar, y otras veces porque también les es más fácil concurrir a los respectivos autódromos que tienen en cercanía. Cualquiera de ustedes que vive en el interior del país tiene un lugar cerca donde girar, y muchos de ellos de una enorme categoría. No es cuestión de repasar la lista, porque es interminable.

Acá en la Ciudad de Buenos Aires el autódromo es el Oscar y Juan Gálvez, el Galvez como dicen mucho, o Ciudad Autódromo como lo denominan por estos días. Pero durante muchísimo tiempo la catedral del deporte motor argentino estuvo, de alguna forma, restringida para las motos y solo hubo lugar para los autos. De vez en cuando un track day privado, de esos que alquilan el autódromo para un evento, y entre tanda y tanda de autos alguna moto podía girar. Últimamente también estuvieron los SBK Track Day organizados por nuestro gran amigo Leandro Chiarandoni, que están buenísimos pero son bastante enfocados en las motos de alta gama.

Desde hace un tiempo dentro del Gálvez comenzó a funcionar el IPDMM, el Instituto de Promoción y Desarrollo del Motociclismo Mundial, con el solo objetivo de sacar a los pilotos de la calle. Con esto no quiere decir que están buscando que no andemos en moto por la calle, sino que dejemos de correr en la calle y lo hagamos en un entorno seguro, con todas las condiciones dadas para que aprendamos y disfrutemos al máximo y, en caso de tener una caída, que sea yéndonos a la leca y no abajo de un camión o generándole un perjuicio enorme a un tercero por culpa de nuestra irresponsabilidad.

Además, dentro del IPDMM funciona la ARTS, Argentina Race Team School, que es el paso ideal para comenzar a despuntar el vicio y empezar a incorporar las técnicas correctas para un manejo deportivo. Posición de manejo, frenado, gestión de la vista, trazado de una curva, etc. Todo lo que hay que saber para salir a la pista se puede ir asimilando en el circuito 10 del Autódromo, instruidos por gente experimentada de la talla de Ariel Buba Rámirez y Horacio Chuliver que, además de ser muy amables y accesibles en la charla, saben un montón.

Y después, para quienes tienen más experiencia, están los giros libres, que son, básicamente, una jornada completa de giros en el legendario circuito 8 del Autódromo de la Ciudad de Buenos Aires dividida por tandas de categorías, para minimizar las diferencias de velocidad y los riesgos que surgen a partir de esto. Una jornada completa que inicia con la apertura de pista a las 10 de la mañana y concluye a las 18 y cuyo foco está puesto netamente en girar y girar…y girar, hasta que se nos acabe la nafta. A la moto o al piloto, lo que ocurra primero.

Los boxes habilitados para que cada uno tome su posición con su moto, mecánico -si es que lo tuviera-, equipamiento, y todo lo necesario para salir a la pista a acelerar, a disfrutar de la moto al máximo y practicar todo lo que queremos con nuestra moto sin molestar a nadie, con todas las normas de seguridad y en el entorno ideal. Ah, sí, y un tema no menor, el costo de todo esto es bastante accesible. Y tiene mucho más valor que lo que se paga, creannos. Sobre todo lo que se lleva cada uno en forma de progreso como motociclista.

Los track days del IPDMM van a estar todos los meses y, como nos dijo Eduardo Rámirez, al frente de la dirección del autódromo, llegaron para quedarse y en el Gálvez están muy contentos de que las motos vuelvan y de volver a ser un punto de desarrollo del motociclismo argentino. Tanto para los que quieren hacerlo de manera profesional o semi-profesional, como de aquellos pilotos del día a día que tienen ganas, de vez en cuando, de exprimir un poco más su moto y pasar un día distinto en la pista. Como siempre, experiencia y amigos siempre se van a llevar.

Es importante destacar el crecimiento del Autódromo de la Ciudad de Buenos Aires, que en los últimos años, no solo incorporó más disciplinas sino que sigue creciendo con un helipuerto habilitado y hangares propios, el circuito con todas sus configuraciones, kartódromo, y próximamente una pista de Motocross para motos y cuadris. Además de un centro médico, un gimnasio diseñado específicamente para entrenar pilotos, zonas de relajación, la emblemática confitería remodelada hace pocos meses y una puesta en valor general de un espacio que es realmente inmenso y que a pesar al paso del tiempo sigue siendo la catedral del deporte motor para todos.

Aprovechando que teníamos la Kawasaki Z400, una moto que ya habíamos probado en ocasiones anteriores, decidimos llevarla a un lugar distinto. La pista no es el escenario principal para el que la moto fue desarrollada, pero sin dudas una Z400 en la pista es un juguete más que interesante. Sobre todo porque en la calle nos dejó siempre con la impresión de ser una moto que anda fuerte. Independientemente de su cilindrada.

Pero para hablar de la moto en particular haremos otra nota aparte. Hoy es momento de mostrarles lo que fuimos a hacer, de lo que hay en el Autódromo para que todos ustedes puedan disfrutar. No hace falta tener la moto de pista más picante y el mono más pro de todos, solo hace falta ir con protecciones acordes a lo que uno va a hacer y después, a medida que nos vamos entusiasmando y progresando, como en todo, podemos ir incorporando mejor equipamiento. Y la mejor moto para girar es la que tenés, solo tiene que ser de 250 cc para arriba.

Antes de dejarlos con las fotos y el video de la experiencia vivida, y a la que queremos seguir concurriendo todas las veces que podamos, queremos agradecer al Autódromo de la Ciudad de Buenos Aires y al Instituto de Promoción y Desarrollo del Motociclismo Mundial por abrirnos las puertas para poder mostrarles esto que está disponible para todos ustedes; a ProSkin por prestarnos la mejor indumentaria para ir, una marca nacional de calidad internacional que tiene muchos años de laburo y desarrollo sobre sus espaldas; a nuestros sponsors de siempre HJC e Ipone por los cascos y productos para el cuidado de nuestras motos y las que no son nuestras; y a Kawasaki Argentina por prestarnos una moto que es un misil para la cilindrada que tiene y que se sintió muy a gusto en el asfalto del circuito más legendario de la República Argentina.

Ahora sí. Mejor que leerlo es verlo. Track Day del IPDMM en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez. Pasen y vean. Y la próxima…vayan.

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5 Responses

  1. Excelente propuesta. Averiguando son 13.000 pesos por la jornada completa! Creo que te quedas sin combustible antes o se te caen los brazos. De 10 a 18… Me resulta economico realmente asi q posiblemente me este anotando para la proxima salida! Gracias por la data chicos!

    1. Mientras se esté en movimiento no hay mucho drama siempre y cuando sea una moto relativamente moderna y esté en buen estado. Un cambio de aceite previo nunca está de más en una moto en la cual el aceite se exige tanto más como en una moto refrigerada, básicamente por el aceite. La interceptor por ejemplo tiene casi 4 litros de aceite en el cárter. Tanto como mi Gol 1.4!

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