Bi-Pilen: Husqvarna inaugura una nueva era para las flechas con la Svartpilen 801 bicilíndrica

En noviembre de 2017, y después de un largo tiempo de desarrollo, concepts y fotos espía, Husqvarna Motorcycles finalmente presentó sus flechas, Vitpilen y Svartpilen, en el Salón de Milán. Allá lejos quedaron los tiempos en que las marcas del Grupo Pierer participaban de la principal muestra del mundo, aunque siempre están los rumores de que regresan, como lo hará BMW este año.

Desde entonces hubo más de una flecha, blanca o negra, en el lineup de la histórica marca sueca en esta nueva etapa simple, progressive, y todas compartían una característica en común: estaban propulsadas por motores de un solo cilindro. Dependiendo el mercado las presentaciones variaron entre 125, 200, 250, 401 y 701, pero todas las versiones disponibles contaron con motorizaciones monocilíndricas, con el de 693 cc como estrella en las tope de gama, ofreciendo muchísimo torque y potencia.

Hasta ahí todo muy lindo, la mecánica contribuía al diseño, logrando motos muy simples, limpias en sus líneas, livianas y angostitas, y Husqvarna de esta forma tenía su interpretación de lo que era una moto naked, una tirando para el lado de las cafe racer, otras para el lado de las flat track y scramblers, compartiendo los chasis y las motorizaciones con los modelos Duke de KTM.

Pero claro, un día la Duke 690 desapareció y la reemplazó una bicilíndrica, la que todos conocemos como el bisturí, con la llegada de la primera en la saga 790, impulsada por el hoy ultra reconocido LC8c de 799 cc, bicilíndrico y con su cigüeñal calado a 285˚, emulando de alguna forma el orden de encendido de los v-twin de 75˚ que usaba KTM en sus mecánicas de mayor cilindrada, ahora con un motor mucho más moderno, fácil de producir y compacto.

Entrados en 2024, la familia de las flechas tuvo que dar un paso al frente también para adaptarse, quizás, al paladar de los usuarios del estilo de moto que esta línea propone, y dejando de lado el monstruo del monocilíndrico de la 701 para la versión enduro y supermoto, por ahora. Finalmente llegó a la famila Svartpilen la 801, que comparte con la Duke de KTM aquel motor de 799 cc, en este caso con una puesta a punto de 105 caballos de potencia a 9.250 rpm y 87 Nm de torque máximo a 8.000 rpm.

Llamativamente, si bien se nota a simple vista la mayor complejidad de su mecánica, la Svartpilen 801 conserva el estilo y las líneas de su predecesora con mucha fidelidad. Se la ve una moto más armada, con un desarrollo más complejo, pero a cualquier persona que se la pongas adelante va a decir que es una Svartpilen sin lugar a dudas.

¿Que hay de nuevo en esta moto de Husqvarna? Bueno, todo y casi nada al mismo tiempo. Es una moto completamente nueva para la marca, y el cuadro es exclusivo de este modelo con componentes hidro-formados y todo soldado con robots, pero el resto de la ciclística son componentes ya conocidos dentro del grupo KTM. Si es muy interesante cómo está integrado el subchasis, atornillado al cuadro, como parte del asiento y del remate de la moto.

El motor es totalmente nuevo para la marca, ya que el de la Norden 901 es de mayor cilindrada, pero es un conjunto mecánico super conocido ya. El diseño frontal es inconfundiblemente Husqvarna, con la misma luz que tienen todas las motos de calle de la marca, aunque la pieza no sea la misma. La novedad dentro de estas línea de producto de Husqvarna es que esta Svarpilen 801 deja de lado el instrumental redondo de LCD, que ya venía pidiendo cancha, y lo reemplaza por un TFT color con conectividad y todos los chiches.

Obviamente estamos ante una moto con el último paquete electrónico de ABS y control de tracción de Bosch, con el sistema Easy Shift –quickshifter-, tres modos de conducción, anti wheelie -que en realidad es un control electrónico que permite distintos grados de wheelie-, control de freno motor, control de tracción y demás magias electrónicas.

Al final de cuentas, el combo de la Svartpilen se mantiene sin cambios. Un diseño de líneas simples y bastante limpias, que se mantiene desde que el modelo irrumpió en el mercado hace unos 7 años, en una moto ligera y con un motor de buenas prestaciones, ahora bicilíndrico, con el foco puesto en el disfrute de manejarla sin muchas distracciones.

En resumidas cuentas: 190 kilos en orden de marcha, 14 litros de combustible, 105 caballos, 87 Nm de torque, doble freno a disco de 300 mm adelante con pinzas de 4 pistones, suspe WP Apex con todos los reglajes y cubiertas Pirelli MT60RS en 120/60/17 y 180/55/17.

Suena como un plan entretenido.

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